CALÍGULA...
Resulta que cuando la romana Agripina La Mayor, vio a ese atleta, buen mozo, llamado Nerón Claudio Druso, apodado Germánico, pensó: ese caón me gusta para el papá de mis hijos. Y se le cumplió el deseo, porque el Germánico, nomás le engendró tres chamacos y tres chamacas. El más chico de los varones, llamado Cayo Julio César Augusto Germánico, nacido un 31 de agosto, pero del año doce, fue el preferido y desde niño, le vieron espolones para gallo. Don Germánico, le inculcó al Cayo el arte de la guerra, llevándolo al campo de batalla, donde el chiquillo recibió en vivo y a todo color, clases de manejo de espada, lanza y otros artefactos, propios de combate. Es probable que cuando Cayo Julio César de siete años, salió con la vestidura de un digno guerrero y calzando sus pequeñas sandalias, no faltó algún ingenioso soldado que le apodó CALÍGULA, ya que este término quiere decir “botita” A la muerte del padre, el niño CALÍGULA de doce años, quedó en total desamparo. En un acto ...